Crítica de “Rayuela (Julio Cortázar)"

He leído Rayuela ya cuatro veces, si es que se le puede llamar leer a lo que he venido haciendo, pues no existe una forma de leer este libro; existen muchas. Se trata de una de las obras más trascendentes en la historia de la literatura latinoamericana y universal. Publicada en París en el año de 1963 Rayuela, según muchos, marcó a toda una generación de intelectuales, y la sigue marcando hasta nuestros tiempos. Es un libro ─a mi punto de vista─ experimental que cumple las expectativas de dicho experimento, sumergiéndonos en la aguda prosa del maestro argentino, Rayuela de pronto nos envuelve en la vida de su protagonista, nos eleva a caminar por las calles de un París olvidado y roído por los recuerdos, un Buenos Aires lleno de decepciones y por último en un circo donde abundan las contradicciones existenciales. Es la tentativa de llevar toda una vida a la escritura. Además Rayuela en la 2_da forma de leerse nos regala algunos rasgos literarios del maestro Morelli, quien en el fondo resulta ser un alter-ego del mismo Cortázar, dichos capítulos sueltos resultan ser confesiones literarias del mismo autor, así como sus teorías literarias, en ellas encierra lo que Cortázar siempre dijo de rayuela: “No es una anti-novela como tal, sino al contrario, creo que eso de anti-novela suena a que destruye, Rayuela no destruye, sino busca nuevos parámetros de cómo concebir la narrativa, busca nuevas formas estéticas en la novela”. Cortázar basándose en esto, logró crear una serie de libros que presidieron a Rayuela con la misma fuerza e intensidad de su técnica experimental. Recomendable libro. No recomendable para quienes se inician en la literatura.

Lucas Luján